domingo, 11 de septiembre de 2011

¿Por qué Martí Batres?

¿Por qué Martí Batres?

Por René González

Martí Batres es un político joven pero con una importante trayectoria siempre de izquierda. De él recuerdo algunas estampas de su participación honesta en la lucha política y social que hoy es buen momento para reseñar.

En 1994 Martí Batres colaboró con sus compañeros en organizar una de las visitas de Cuauhtémoc Cárdenas a la UNAM, el evento se realizó en otro de los momentos complicados para la izquierda mexicana: el zapatismo emergía con fuerza entre la comunidad estudiantil, y Diego Fernández de Cevallos era el alfil de Carlos Salinas para golpear la candidatura de Cuauhtémoc desde el flanco derecho. No obstante, la visita de Cárdenas a la UNAM fue un gran acontecimiento, en gran medida porque lo organizaron dirigentes universitarios que venían de la lucha estudiantil en defensa de la gratuidad de 1986-1987 y de la experiencia del Congreso Universitario. Con condiciones muy diferentes a las de 1988 cuando la efervescencia cardenista en la UNAM fue un hito, la explanada de Rectoría lució nuevamente a reventar en 1994.

Entre 1997 y el año 2000 el PRD gobernó todas las delegaciones debido a que los entonces delegados eran designados por el Jefe de Gobierno. En Benito Juárez el delegado era Ricardo Pascoe, y Martí Batres era diputado local, siendo hasta la fecha el único dirigente del PRD que ha ganado un cargo de representación popular en esa demarcación. En las elecciones internas de 1998 para el Congreso Nacional del PRD, el grupo de Pascoe utilizó el aparato delegacional para intentar ganar los delegados al Congreso. Con todo en contra, recuerdo gratamente la arenga de Martí desde una mesa a la gente de base, a la militancia de toda la vida que él conoce muy bien. A partir de un minucioso trabajo organizativo de base, el grupo de Martí ganó aquella elección interna 3 a 1.

Debió ser también en 1998, el Ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas rendiría su Informe como Jefe de Gobierno en la Asamblea Legislativa. El personal de resguardo del recinto amenazó con un paro y boicot del evento. Un grupo de estudiantes acudimos al recinto de Donceles a pernoctar para colaborar en el desarrollo del Informe. La noche era tensa, Martí Batres nos pidió actuar con serenidad y responsabilidad, sin caer en provocaciones. A fin de cuentas en un escenario adverso el informe de Cárdenas se llevó a cabo.

En julio de 1998 se organizó un evento por el primer aniversario del triunfo del PRD en la ciudad de México, Martí Batres fue uno de los oradores. Al estilo de una de las expresiones del partido un pequeño grupo trató de organizar una rechifla como provocación, Batres continuó su discurso, siempre se ha caracterizado por ser un gran orador, en este caso no fue la excepción, remontó la provocación, y selló el acto con una mayoría de aplausos.

En 2001 fue imprescindible el cabildeo y el discurso de Martí Batres en el pleno de la Cámara de Diputados para que se expresaran en la máxima tribuna los pueblos indígenas que se aglutinaron en la Marcha del Color de la Tierra convocada por el EZLN y el Congreso Nacional Indígena. En 37 días caminó la Marcha del Color de la Tierra a lo largo de 6 mil kilómetros. La respuesta oficial a los millones de personas que participaron en más 70 actos multitudinarios llegó el 25 de abril de ese mismo año, cuando todos los partidos políticos (incluido el PRD) aprobaron por unanimidad una reforma constitucional que desconoció los Acuerdos de San Andrés. Martí Batres no sólo apoyó -en contra de la obtusa visión las derechas- la intervención de la comandancia indígena del EZLN en la tribuna de San Lázaro, sino fue una de las voces y votos disonantes con el acuerdo que un sector del PRD avaló en contra de la causa de los pueblos indígenas.

En 2005 el año del desafuero de AMLO, grupos de estudiantes fuimos convocados a una reunión con Elena Poniatowska y Martí Batres, quienes encabezaron la comisión coordinadora de la resistencia civil contra el desafuero. Ante la operación de Estado para sacar a Andrés Manuel López Obrador de la contienda presidencial, Martí Batres puso todo su empeño para lograr las movilizaciones más grandes registradas hasta entonces de la izquierda mexicana. No fue una labor de escritorio sino de contacto directo con los grupos activos como el caso de los universitarios. También ante la adversidad ganamos esa batalla y contra la voluntad de la mafia del poder AMLO estuvo en la boleta en 2006.

En 2006 Martí Batres se mantuvo día y noche en el gran campamento de Zócalo- Reforma, decenas de estudiantes del Frente Universitario de Apoyo Crítico a López Obrador pudimos participar con él en grandes acciones de resistencia como la toma de la caseta de cobro de Cuernavaca, dónde se permitió el paso gratuito a miles de automóviles, o la toma de la Secretaría de Hacienda. La lealtad hacia el movimiento por parte de Batres es incuestionable, se ha dado en el terreno de la acción directa y no sólo en el discurso. Seguramente habrá cientos de estampas de Martí Batres y su militancia como las referidas aquí.

En la lucha política por naturaleza hay momentos de condiciones adversas, pero mientras haya claridad y compromiso con el proyecto histórico de la izquierda y con el movimiento transformador todo es remontable, es el caso de la participación genuina de Martí Batres a lado de las causas del pueblo. Nos reconocemos en su lucha por la democracia, por la educación gratuita, por la libertad de expresión, por los derechos sociales, contra el autoritarismo y por la disminución de las desigualdades económicas. Tenemos memoria y horizonte.

Como alguna vez dijo Heberto Castillo: "En la lucha política revolucionaria el que va por un objetivo personal suele desanimarse pronto. Creo que en la lucha revolucionaria quienes tienen posibilidades de hacerla avanzar sustancialmente son aquellos que van a dar y no a recibir. Durante la Revolución Mexicana quienes lograron los mayores avances fueron aquellos que tenían cosas que aportar.” También, como expresó Andrés Manuel López Obrador: "Martí Batres es un político con principios e ideales", por tales razones avanzaremos en la 4ª transformación de la Ciudad de México y en la 4ª República para México.

Este texto forma parte de la columna Por la calle del desengaño que escribo en Facebook.